Anna entró a la cafetería, abrió el periódico y se apresuró a buscar en el alguna nota que hablara sobre la captura de Hammer. De nuevo, otro día sin tener noticias de su paradero. Pensó por un momento que podría estar muerto, quizás por eso nadie hablaba de él pero seguramente su muerte sería una noticia que acapararía los titulares de los periódicos. Cerró el periódico y frunció el labio, necesitaba volver a Hill Crest, saber cómo se encontraba Jeffrey, qué había pasado con Craig. A final de cuentas ella no era culpable de nada, al menos eso creía. Cruzó los brazos por encima de la mesa y recargó su cabeza sobre ellos, llevaba días sin dormir y lucía demacrada. Además tenía poco dinero y mucha hambre. La mesera se aproximó de inmediato y le sirvió una taza de café y le dio una galleta. -¡No! -hizo una pausa-, es que no tengo dinero. -No es nada -dijo y se dirigió a servir a las mesas. Anna observó la galleta pudo devorarla en ese momento pero sabía que si la guardaba tendría comida p...
Autora de libros de romance